Al igual que la ropa, los guantes o la protección para la cabeza, es fundamental utilizar siempre un calzado de seguridad adecuado en el trabajo que proteja los pies de los posibles riesgos del entorno laboral. 

Dependiendo del sector empresarial, hay que tener en cuenta una serie de normas que regulan la utilización óptima del calzado de protección. Te explicamos todo lo que debes saber sobre las normas para calzado de seguridad.

Normas para calzado
de seguridad

La normativa de calzado de protección establece las características, los requisitos mínimos y los métodos de ensayo para cada tipo de calzado, sea o no un equipo de protección individual (EPI).

El propósito es regular estos equipos para que cada calzado alcance los estándares mínimos de seguridad. Es responsabilidad de los empresarios y fabricantes tener conocimientos de la normativa, pero es muy importante también que los empleados la conozcan.

La EN ISO 20345 es la normativa que regula el calzado de seguridad para uso personal en toda la Unión Europea. Esta normativa se clasifica en dos clases:

CLASE 1

SB – Calzado de seguridad con puntera resistente a un impacto de 200 J.

S1 – SB + zona del talón cerrada y con capacidad de absorción de energía del talón,

propiedades antiestáticas y resistencia a hidrocarburos.

 

S2 – S1 + penetración y absorción de agua en la zona superior.

S3 – S2 + resistencia a la perforación de la suela.

CLASE 2

S4 – S3 + zona del talón cerrada y con capacidad de absorción de energía del talón,

propiedades antiestáticas y resistencia a hidrocarburos.

 

S5 – S4 + plantilla con resistencia a la perforación de la suela y suela con resaltes.

Dentro de la normativa de calzado de seguridad hay algunas normativas más específicas dependiendo de la profesión:

  • EN ISO 20349 – Equipo de protección personal. Calzado de protección frente a riesgos térmicos y salpicaduras de metal fundido como los que se encuentran en fundiciones y soldadura. Requisitos y métodos de ensayo.
  • EN ISO 15090 – Calzado para bomberos.
  • EN ISO 50321 – Calzado con aislamiento eléctrico o calzado aislante de baja tensión.
  • EN ISO 17249 – Calzado de seguridad resistente al corte por sierra de cadena.
  • EN 13832 – Calzado protector frente a productos químicos. Requisitos para el contacto limitado con productos químicos.

En este apartado analizaremos los diferentes tipos de calzado de seguridad existen: 

Calzado de seguridad de uso general

Es usado por trabajadores que realizan tareas en áreas en las que no hay riesgo de sufrir impactos, como pueden ser los trabajos de oficina.

Calzado para el sector sanitario

Son recomendables aquellos que cuentan con suela antideslizante y una plantilla ergonómica y antibacteriana.

Calzado con puntera o suela antiperforación

Calzado con una plantilla especial o suela antiestática

Para evitar accidentes eléctricos se recomiendan los zapatos con una plantilla especial o suela antiestática para evitar las descargas eléctricas.

El calzado de seguridad tiene la finalidad de proteger los pies de los trabajadores de impactos, lesiones o posibles riesgos en el entorno de trabajo. Para elegir el calzado de protección más adecuado, hay que saber cuáles son las necesidades laborales y qué nivel de protección posee cada tipo de calzado.

En Impotusa tenemos el calzado de protección y seguridad que más se adapta a cada necesidad, además de toda la ropa de protección laboral que necesites. Contacta con nosotros.

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