¿Cómo afilar un cuchillo?

Los cuchillos son herramientas de gran simpleza, pero que requieren de un mantenimiento frecuente. Su función única es cortar, pero para que un cuchillo corte adecuadamente es primordial que esté afilado. 

¿Cómo afilar un cuchillo? Existen diferentes herramientas para afilar de forma adecuada los cuchillos. Estos son los métodos más conocidos y que ofrecen unos mejores resultados.

¿Cómo afilar un cuchillo?: Métodos

Afilar cuchillos con una chaira o barra de acero de afilar

¿Qué es una chaira? Se trata de uno de los elementos más simples y antiguos utilizados para afilar. Está compuesto por una barra de acero en forma de cilindro. Para afilar los cuchillos con una chaira es recomendable colocar los cuchillos en un ángulo de 20º, por lo que se recomienda adquirir chairas magnetizadas que faciliten esta labor.

A la hora de afilar un cuchillo con una chaira es importante agarrarla con fuerza y siempre con mucho cuidado y detrás del mango. Desliza ambos lados del cuchillo a través de toda la chaira de forma constante y a un ritmo aceptable. Ten en cuenta que debe hacerse empezando el movimiento desde la parte más cercana al mango del cuchillo y hasta el final de este. Una vez hecho esto, lava el cuchillo y estará listo para cortar de nuevo. 

Afilar un cuchillo con piedra 

Otra de las metodologías de afilado más eficientes es utilizar una piedra húmeda o mojada. Es una opción muy versátil y que se amolda casi a cualquier tipo de cuchillo. Se recomienda que el gramaje de la piedra oscile entre los 1.000 y los 4.000. 

Para afilar un cuchillo con piedra es necesario colocar la hoja del cuchillo en un ángulo de entre unos 15-20º. Pasaremos una y otra vez ambos lados del cuchillo por la piedra con ritmo, de delante a atrás. Ten en cuenta que no debes despegar la hoja de la piedra en ningún momento durante los movimientos y que no debes ejercer una presión exagerada si no quieres conseguir el efecto contrario y romper o estropear la hoja del cuchillo. 

Afilador de cuchillo manual 

Son los escogidos cuando el objetivo principal de su uso está enfocado en un mantenimiento rutinario o en casos en los que los cuchillos se encuentran ya bastante desgastados o en mal estado y necesitan algo parecido a una reparación.

Los afiladores manuales pueden ser muy variados, aunque es cierto que al ser herramientas manuales suelen seguir un diseño bastante similar. Se caracterizan por poseer una o varias ranuras con discos sobre los que, ejerciendo una presión controlada, deslizaremos la hoja del cuchillo de adelante a atrás. 

Afilador de cuchillos eléctrico 

El afilador de cuchillos eléctrico tiene una estructura muy similar a la que hemos podido ver en el caso del afilador manual. La gran diferencia entre estos modelos reside en que el afilador eléctrico cuenta con un motor eléctrico. 

El afilador eléctrico ofrece un valor añadido, pues permite desempeñar el trabajo de afilado sin esfuerzo y de una forma mucho más cómoda, sencilla y veloz. Su motor eléctrico será el encargado de hacer mover su material abrasivo para que este afile el cuchillo de la forma más precisa que sea posible. 

¿Cómo evitar que se desafilien los cuchillos?

Aunque hemos visto una serie de herramientas para lograr afilar nuestros cuchillos, compartimos con vosotros un listado de consejos para conseguir prolongar el máximo tiempo posible la necesidad de afilarlos de nuevo:

  • Utiliza tablas de corte adecuadas. Evita superficies excesivamente duras que puedan distorsionar el filo de tus cuchillos. Haz uso de tablas de plástico o madera y evita materiales metálicos. 

  • Limpia muy bien el cuchillo después de cortar alimentos ácidos. El ácido tiene propiedades corrosivas que a la larga y sin una buena limpieza podría llegar a dañar los materiales del cuchillo, modificando los resultados que ofrece. 

  • Evita cortar alimentos excesivamente duros en proceso de congelación. Por lo general los cuchillos no están diseñados para el corte de este tipo de elementos y podrían dañarse tras su utilización.

  • Lava y seca los cuchillos a mano. Las altas temperaturas del lavavajillas no están hechas para los cuchillos y provocarán con el paso del tiempo que estos pierdan eficiencia. Lávalos a mano con agua tibia y sépalos de forma posterior con un paño sin ejercer una presión excesiva. 

  • Almacena los cuchillos de forma adecuada. La mayoría de las personas tienden a guardar sus cuchillos en un cajón en el que todos ellos están en contacto. Evita hacerlo, ya que el roce de unos con otros estropea sus filos. 

  • No ejerzas presión lateral. Es una de las formas más frecuentes en la que los cuchillos tienden a desafiliarse. No lo hagas en la medida de lo posible. 

En Impotusa tenemos todo tipo de herramientas para que afiles tus cuchillos de forma adecuada. Contacta con nosotros, te ayudamos.

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